Las personas que investigan y doctoran en España en materias humanísticas no pueden ir a investigar a Grecia. No es algo nuevo, España es uno de los pocos grandes estados europeos que no cuenta con una Escuela Española de Estudios Helénicos en Grecia, una institución como la que tienen muchos otros países (entre los que se encuentran estados desde el Francés hasta Georgia o Dinamarca). La creación de esta institución se ha intentado llevar a cabo durante más de treinta años y nunca, bajo el pretexto de imposibilidades económicas y nulas voluntades políticas, se ha podido formalizar.
La legislación griega en materia de Arqueología no permite a los centros de investigación extranjeros trabajar en su territorio si no disponen de una escuela o instituto creados para tal fin. Esta restricción se encuentra en el artículo 36.1 de la Ley 3028/2002, «Sobre la protección de las Antigüedades y de la Herencia Cultural en General», en la que se señala que «las excavaciones sistemáticas podrán llevarse a cabo […] por misiones arqueológicas extranjeras o escuelas que estén establecidas en Grecia». Esta ley, por tanto, impide la realización de esos trabajos a grupos y equipos que no cuenten con el respaldo institucional que proporcionaría la Escuela; y este es el caso de España.
No siempre hemos estado lejos de la apertura de la Escuela Española. En 1992 el Estado compró un edificio para albergar la sede de la Escuela a los pies de la Acrópolis, pero este edificio nunca llegó a albergar el centro y acabó siendo cedido al Instituto Cervantes en el año 2014. Además de la obligación de contar con una sede permanente en territorio heleno, otros requisitos que marca el Gobierno griego es el nombramiento de un Director o Directora, la edición de la revista y contar con una pequeña biblioteca, requisitos que, sin duda, España sería capaz de cumplir.
Esta problemática ha sido recogida por parte de la Sectorial Interuniversitaria de Estudiantes de Humanidades – SIUEH, quien ha mantenido reuniones con asociaciones, universidades y las embajadas de España en Grecia y de Grecia en España, con el fin de sumar apoyos y esfuerzos para hacerse oír por el Gobierno Central y el Ministerio competente y conseguir, de esta forma, el compromiso de crear, tras más de 30 años, la Escuela Española de Estudios Helénicos en Atenas; una escuela transversal, una escuela humanística en la que haya espacio para el estudio de la arqueología, pero también para el estudio de la cultura, la historia, las lenguas o el arte.